Sello: Relapse
A lo mejor no es tan malo que Mastodon se haya ido a una multinacional. Mientras las nuevas bestias pardas del metal de engrudo sacan y no sacan su nuevo trabajo, habrá que ver si su fichaje por una major les vuelve o no comerciales, si reblandecen su sonido, lo cual no tendría mucho sentido, porque el público, lo que quiere, es a unos Mastodon en estado puro.
Mientras tanto, sus antiguos compañeros del sello Relapse High on Fire siguen su guerra particular contra la estupidez mediática con este su tercer redondo, disco que podría beneficiarse del fichaje de Mastodon por una casa grande, en el sentido de que una posible masificación, una llegada a las cadenas de tiendas y emisoras de radio de este tipo de sonido capitaneado por Mastodon, haría que mucha otra gente se interesara por grupos afines. ¿Y qué más afín a la gente de Mastodon que estos irrebatibles High on Fire?
No nos engañemos, a la gente le ha dado por decir que si High on Fire son un grupo mezcla de doom y stoner; a mí eso me parece de un reduccionismo muy simplista; la cosa, para mí, es bastante más complicada, tiene más enjundia que una simple mezcla de estilos metidos en una coctelera como si de los condimentos de un potaje se tratara.
La música de High on Fire es algo muy difícil de definir, es algo así como unas guitarras de Black Sabbath con la mala idea de los Motorhead de los setenta, cuando todavía eran puro salvajismo, y sólo salvajismo. High on Fire saben tocar, como saben hacerlo Motorhead claro, pero High on Fire tienen esa furia juvenil que falta en tantos combos actuales. No se les puede adscribir a ningún estilo, pero si te gusta la triada que hemos nombrad (Sabbath, Motorhead, Mastodon), tira corriendo a por el pedazo de disco este, que te va a dejar humeando y echando espumarajos por las orejas.
Artículo escrito por ignacio rielas