Sello: Rock Estatal Records
Llevábamos cuatro largos años sin disco de Mala Reputación, pero por lo que manejamos entre manos ha sido un periodo más que fructífero para la banda. "Eternas promesas" les alejará de esa etiqueta, con un trabajo mimado al detalle, con una profesionalización extrema del concepto del disco. Desde la cuidada y abundante fotografía del artwork al sonido del disco. Todo forma parte de un mismo concepto que va un paso más allá en la trayectoria de los asturianos tras este periodo de introspección.
Siguen siendo Mala Reputación, de eso no hay duda. Pero se interesan por pisar nuevos terrenos, por llevar más allá sus capacidades y evitar caer en la repetición. Se huye del rock estatal más típico que, pese a valerles en sus orígenes, quieren ahora enriquecer con temas de estructura más compleja, de arreglos más estudiados y de ritmos más variados. Se percibe, especialmente en la primera mitad del disco, una cierta internacionalización en su sonido -¿existe el verbo foofighterizarse?-, una búsqueda por nuevos sonidos en sus guitarras y en formas de jugar con la voz.
"Fuego" es el tema que abre el disco, y nos deja con la piel helada. Arranca a capella, cantado casi entre murmullos, con el único acompañamiento del crepitar de una hoguera. De arranque lento y melancólico, casi depresivo, va sumando instrumentación y coros y ganando fuerza hasta llegar a un auténtico trallazo que ya nos deja entrever en sus cinco minutos y medio de duración que no va a ser un disco más. A partir de ahí, sólo se trata de disfrutar y explorar los múltiples recovecos de este disco: de sus himnos, de sus momentos de tranquilidad, de su impactante base rítmica, de gritos desgarradores, de sentidas letras sobre superación y lucha interior...
"Eternas Promesas" marcará un antes y un después en la ya dilatada trayectoria de Mala Reputación. No hay dudas
Artículo escrito por
Héctor Mainar