Enrique Bunbury acaba de publicar una atípica presentación del disco,
muy personal, para ponernos en situación sobre de qué va su nuevo
lanzamiento, del que podremos escuchar el primer single en sólo 9 días. Este es su texto de presentación: --
Sé
que en muchas entrevistas me preguntarán porqué este álbum se llama
Palosanto. Tendré que inventarme algo....: ¿Un modelo de ovni vintage de
los años cincuenta? ¿La madera con la que se construyen las guitarras
que utilizo y los bates de béisbol con los que intento destrozar los
cajones en los que me encasillaron?
Palosanto es mi decimocuarto álbum de estudio. Cuatro con HdS, ocho en
solitario, uno con Nacho Vegas y otro con el colectivo Bushido. Todos
ellos los considero discos de búsqueda. Una permanente huída hacia
adelante. Un viaje interminable que nunca llega a su fin y que pretende
no pasar dos veces por el mismo cruce de caminos. Así, considero que
'Palosanto' es mi catorceavo disco de transición.
La mayoría de
los músicos mostramos en nuestras primerizas grabaciones y a las
claras, cuáles son nuestras influencias, discos y artistas favoritos.
Cuando cumplimos algunos años y ya grabamos una buena cantidad de
álbumes, parecemos esforzarnos en demostrar y señalar orgullosos cuáles
fueron nuestras raíces. Cumplidas ya ambas inclinaciones naturales,
quise que Palosanto fuera un disco contemporáneo, contenido y, espero,
nada ombliguista. Personal, moderno y con vocación universal. Conté de
nuevo con 'Los Santos Inocentes' (con los que ya grabé 'Hellville de
Luxe' - 2008, 'Las Consecuencias' - 2010, 'Gran Rex' - 2011 y
'Licenciado Cantinas' - 2011). Les pedí que guardaran cierta distancia
en sus interpretaciones. Sin dramatismos,… ¡que ya nos conocemos!
Quería, también, que las guitarras y los teclados sonarán a instrumentos
actualizados, alejándonos de tics y lugares comunes. La mayor parte de
lo que suena, como metáfora, lo grabamos con instrumentos recién
comprados. A parte de mi banda habitual, contamos con la
colaboración de un trío vocal femenino de gospel, una orquesta sinfónica
y un experto en síntesis de sonidos y frecuencias. ¿Es un disco de Rock? ¡Y yo qué sé! ¡Qué más da!
Ser el productor de mis propios álbumes me otorga un control total
sobre lo que quiero decir y cómo quiero decirlo. Acepto el papel de
director de una película en la que también tengo un papel de actor. He
dirigido una película compleja, con muchos recovecos y lecturas. Es
posible que una primera escucha, de tirón, y dada su duración, sea
difícil y extrema. Lo siento de verdad, a mi me gustaría hacer discos
para todos los públicos, pero me salen estos.
Palosanto es un
disco coral. En él coexisten, metafóricamente, muchas voces. Muchas
opiniones. No defiende una sola posición o posibilidad. Estoy a favor y
en contra de lo que sostiene. Depende del día y la hora. Pero un hilo
conductor, al que sí me aferro, subraya lo dicho en la mayoría de las
canciones. Este es la necesidad real y urgente de un cambio. La
insostenibilidad del proyecto humano tal y como lo defendemos, o
defienden en nuestro nombre. En los tres años en los que estuve
escribiendo el material que configura este álbum, el hartazgo y
alienación llevó a jóvenes y no tan jóvenes, a salir a la calle a
manifestar el descontento y desencanto, en México, España, Chile,
Colombia y USA. En Grecia, en Túnez, en Inglaterra y en tantos otros
lugares del mundo, simultáneamente. Intenté hacer un disco social y dar
voz a un sentimiento general, pero he vuelto a hablar de mí mismo y de
cómo lo viví y sentí. Divido el álbum en dos partes: La primera,
musicalmente más digital y tecnológica, abarca el inicial entusiasmo, el
cinismo de algunos, la desesperación y negatividad de otros y la lógica
conclusión de que ninguna revolución triunfó sin derramamiento de
sangre. La segunda, musicalmente más orgánica, es la mirada hacia el
interior: el verdadero cambio sólo es posible en un círculo mínimo de
amistad o de pareja, la validez y actualidad de la cosmogonía indígena, y
la conclusión final de que el verdadero cambio empieza y acaba en uno
mismo y que todo cambio, o es verdaderamente espiritual, o no lo es.
Algunos me preguntaron inquietos y preocupados por el significado de la
portada. ¿Un barco en el desierto, llamado 'God is Love', avistando un
Ovni? ¿Comienza tu época cristiana?¿Son tan dañinos e irreversibles los
efectos colaterales de las drogas? Espero qué las canciones, la portada,
los vídeos y la gira, tengan las suficientes lecturas como para que las
respuestas las dé el oyente. Espero que, de alguna forma, tras las
preguntas que el autor se hizo (o sea, me hice) construyendo el universo
sonoro de Palosanto, surjan nuevas cuestiones en la cabeza del que lo
escuche y, ojalá, disfrute.
carlos tipan -
08 de septiembre de 2013
Viniendo de un maestro como Bunbury este disco va a estar estupendo… gracias por un nuevo disco Enrique y esperando q tu jira pase por Ecuador estaré en primera fila