En los 90 y principios del nuevo milenio, una banda de folk-rock identificó como pocos a la nueva música aragonesa. Unidos de casualidad, crearon numerosos himnos con un humor socarrón y reivindicación de las raíces, el pueblo y la comunidad. En el resto de España, trascendieron con temas himno como la omnipresente "15 de agosto" y colaboraciones con grupos como Celtas Cortos en
"Jódete y Baila". Hoy, 20 años después, anuncian su regreso. Será en una única fecha -por ahora- el próximo 23 de abril en Zaragoza, el día del patrón de Aragón. Muchas ganas de verlos de vuelta sobre el escenario, donde volverán a unir a generaciones en torno a la música festiva.
Artículo escrito por
Héctor Mainar