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El pasado sábado día 15 se celebró en Casetas el Festival Ribera Rock, una noche de reunión del rock aragonés con Los Lügers, Tako e Insolenzia, además de las versiones de ZGZ Top Rock Classics. Un interesante festival con grupos en muy buena forma, que no tuvo el tirón de público que la iniciativa merecía, probablemente a causa de la vagancia del público zaragozano para desplazarse aunque sean 10 km de su ciudad para ver un concierto de grupos a los que tantas ocasiones tenemos de ver en la capital aragonesa. ¡Pobres de estos perezosos, pues de haber acudido al pabellón hubieran disfrutado de una grata velada!
Los Lügers abrieron fuego, llegando con su nuevo trabajo "Lucifer" bajo el brazo, con su oscura estética y su potente rock and roll en el que fueron desgranando muchos de los temas de este nuevo disco, y dos jugosas versiones que dejan claro por donde se mueven como banda: las archiconocidas "Ace of Spades" de Motörhead y "Rock 'N Roll" de Led Zeppelin. En disco o en directo, esta es una de esas bandas a las que hay que seguir el rastro muy de cerca, pues su futuro augura seguro el éxito.
Después saltaron Insolenzia a las tablas, en un estado de forma impresionante. Con los buenos temas de sus dos últimos discos, han puesto toda la carne en el asador para llevarlos a un directo muy dramatizado, con Daniel Sancet fuera de sí, con mil elementos de attrezzo para vestir las diferentes canciones, bajando al público, dejándose querer en las cámaras... Y el resto de la banda, engrasada como nunca y con Isabel clavando cada nota con elegancia. "Con el mundo entre las piernas" estuvo más que presente en los trece temas que dispararon esa noche, aunque fue alternándose con muchos otros de su recientemente cerrada trilogía "Celesto y la luna", e incluso hubo espacio para un tema inédito: "Tus besos verdes". El show de Insolenzia es impecable, sumamente profesional, y en ese gran escenario estaban como pez en el agua. Que vayan acostumbrándose.
Cerraban los conciertos al uso Tako, probablemente la banda más arraigada en el rock aragonés, con seguidores acérrimos multigeneracionales, rockeros o no. Venían esa noche con sorpresa: al bajo no estaba el Peri, que está girando por Mexico con José Andrëa y Uróboros, y tampoco Fernando Mainer, que tenía concierto con Mägo de Oz. ¿La solución? Enrolar para la ocasión a otro de los bajistas más míticos del rock español: Rafa J. Vegas, bajista de Rosendo, tiró de galones y se hizo con el repertorio rapidamente para salvar el bolo. Podía haber caído por falta de público, por el trancazo manifiesto que llevaba Íñigo Zubizarreta a la guitarra, o por la ausencia de bajista. Pero Tako son mucho Tako, y no perdieron la ocasión de tocar ante los casetanos una selección de sus más míticos temas, regados abundantemente con canciones de "Las campanas de la vergüenza", del que presentaron numerosos temas.
¿Qué contar de su directo? Su elegante primera parte, la contundencia de sus coreados himnos, y la locura final cuando Nacho deja el teclado nunca defraudan, y en este año, cerca de cumplir ya los 30 en el escenario, se les siente especialmente intensos como banda en cualquier faceta que analicemos.
Cerraron la noche los ZGZ Top Rock Classics con numerosas versiones del rock ochentero, a modo de fin de fiesta. La próxima cita, en exactamente un mes para vivir el Senderos del Rock en la misma ubicación.
