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Bürdel King-Ladran, luego cabalgamos

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27 de septiembre de 2011 - Crítica de disco  -  Comentarios 1 comentarios
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Sello: Warner Music

El siempre polémico líder de Mägo de Oz, Txus di Fellatio, sale de los parches para ponerse al frente del micrófono en su propia formación. Bajo el nombre de Burdel King llega con un disco plagado de rock and roll, muy fresco y divertido, ideal para escuchar a todo trapo preparándose para un sábado noche.

Si una palabra tuviera que resumir al disco, la escogida sería “canalla”. Lo es por su sonido, directo y afilado, de sonido más limpio que el rock clásico pero puramente enérgico pese a no estar hecho para los oídos más puritanos del rock. Lo es también por sus letras, con una omnipresencia del sexo más liberal, una incitación masiva a la orgía y la diversión sexual bañada de abundantes dobles sentidos y juegos de palabras. Sin tabús en uno u otro aspecto, y con canciones donde los estribillos se cuidan para atraer rápidamente al oyente.

Txus se aleja del heavy metal practicado con Mägo de Oz para inmiscuirse en el terreno del rock como vocalista y compositor. No es la primera vez que escuchamos cantar a Txus, pues ya le habíamos escuchado en temas como La Rosa de los Vientos en anteriores trabajos de su banda madre. Pero sí que es la primera vez que le vemos suelto y cómodo frente al micro. Pese a mostrarse en algunos momentos conscientemente autocontrolado buscando un registro demasiado suave para el rock and roll para evitar el desafine, y echarse en falta quizás algo más de volumen en su voz, el resultado de su labor como vocalista en el disco es más que aceptable. Habrá que verle en vivo, si este disco se traslada a las tablas como todo parece apuntar, pero el caso es que para ser un disco sin más ánimo que la diversión propia, incluso en el aspecto de la voz el resultado es digno de elogio.

Para la banda, Txus se rodea de amigos de otras bandas: Frank –Mägo de Oz-, Sergio Martínez –037, Ankhara, Mägo de Oz-, Anono –Despistaos, Stafas- y Alberto Marín –Hamlet- que le arropan en este trabajo hasta tal punto que incluso Alberto Marín compone dos temas de este disco. En el disco colaboran más amigos, como Patricia Tapia, Kiskilla, Carlos Escobedo y Javier Vargas.

Es un muy buen disco, que alegra escuchar. Era presumible que un trabajo paralelo concebido en torno al rock y al sexo iba a ser poco más que anecdótico, pero el resultado es destacable en todos los aspectos, desde su composición, la cohesión como disco a la ejecución final del sonido del trabajo.
Artículo escrito por Héctor Mainar

Comentarios

Metztli - 27 de septiembre de 2011
Sinceramente ya veo que ahora cualquier cosa le llaman musica. Es un disco horrible, las canciones son malas y los videos peores!. Sobretodo el video de la luna en ti. Que a parte de ser cutrisimo, es machista a cagar, a parte que da pena como van vestidos sobretodo el bateria con esas mierda plumas de pendientes.... y nada que decir de chus. Por dios me has caido a los pies... y que coño hace con simbolos nazis?. Creo que cada vez caen mas bajo. Y antes de seguir perdiendo el respeto de los fans, se tendrian que retirar.

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Fotografía por Héctor Mainar